No cerveza puede durar para siempre, desafortunadamente. Sin embargo, hay muchas maneras de garantizar que cerveza se mantenga lo suficientemente buena para beber durante mucho tiempo después de embotellarse. Hay algunos errores clave que pueden arruinar todo el trabajo que se realizó, por lo que debe tener cuidado cuando llegue el momento de almacenarla. Le daremos algunas reglas para el almacenamiento de cerveza seguro y sanitario para garantizar que no se desperdicie una gota de cerveza.
Siempre almacene a bajas temperaturas
En realidad, hay un delicado equilibrio aquí porque no desea almacenar cerveza a temperaturas extremadamente frías. Para la mayoría de las cervezas, la temperatura ideal para el almacenamiento está ligeramente refrigerada. La temperatura de una bodega típica suele ser una buena manera de pensarlo. A temperaturas más altas, la cerveza puede oxidarse más rápido y desarrollar sabores que no desee.
Mantenga la cerveza en la oscuridad
La luz es uno de los peores enemigos de la cerveza cuando se trata de almacenarlo durante largos períodos. La mayoría de las botellas hacen un buen trabajo al proteger la cerveza de la pequeña cantidad de luz que normalmente ven. Pero para el almacenamiento a largo plazo, debe concentrarse en reducir la exposición a la luz tanto como sea posible. La exposición a la luz puede arruinar rápidamente la cerveza, por lo que debe estar en un lugar oscuro cuando desee almacenarla durante períodos prolongados.
Reducir el contacto aéreo
Obviamente, desea mantener su cerveza en un recipiente hermético, pero incluso esos contenedores pueden contribuir a la oxidación si no tiene cuidado. Si su cerveza está en botellas, siempre manténgalas de pie en lugar de acostarse de lado. Cuando están acostados, expone más superficie de la cerveza al aire en la botella, acelerando el ritmo de oxidación y degradación de la cerveza.
Almacenar en baja humedad
Una regla importante para el almacenamiento de cerveza segura y sanitaria es mantenerla en algún lugar que no sea muy húmedo. La humedad puede no dañar la cerveza en sí, pero puede afectar el entorno circundante en el que la almacena. La alta humedad genera moho. El moho eventualmente puede unirse a los recipientes que sostienen su cerveza.
Comprender cómo las diferentes variedades envejecen
No todas las cervezas pueden manejar el envejecimiento de la misma manera que otras. Con cervezas con un ABV más alto, hay un poco más de margen de maniobra en términos de su vida útil. La vida útil no es tan larga en cervezas o cervezas más aromáticas que dependen en gran medida del sabor de sus lúpulos. Estas cervezas pueden perder lo que las hace especiales mucho más rápidas que las cervezas más pesadas.
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Aniya Li
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